La que quizá sea la década favorita y más añorada de los millennials ha protagonizado un comeback. La moda, música y cultura populares de los 90’s fueron la mejor forma de terminar el milenio, tanto, que incluso rechazamos desprendernos de ellos en este. El estilo grunge de los años 90 invade de nuevo nuestros armarios para convertirse en una opción popular para los estilismos de street style.
La moda grunge surgió como respuesta a la cultura comercial y de consumo de la época, y reflejaba un sentido de rebeldía y desilusión hacia las normas sociales prestablecidas. Aunque el movimiento grunge alcanzó su punto máximo en la década de 1990, su influencia sigue siendo un gran punto de referencia en la moda contemporánea, con elementos grunge que se reinterpretan e incorporan en las tendencias actuales.
¿Qué es el estilo grunge?
El estilo grunge, que emergió en Estados Unidos a principios de los años 90, se convirtió en un fenómeno cultural que trascendió la música para dejar una huella indeleble en la moda. Originado entre jóvenes influenciados por la música grunge, especialmente por bandas como Nirvana y Pearl Jam, el estilo capturó la esencia de la rebeldía y la autenticidad.
Las características distintivas del estilo grunge incluyen la predilección por prendas desgastadas y desaliñadas. Los jeans rotos, las camisetas holgadas y las chaquetas con efecto desgastado se convirtieron en elementos clave del armario grunge. La sobreposición de prendas, como camisas de franela sobre camisetas, era común, y las zapatillas Converse desgastadas completaban el look informal. ¿Alguien ha dicho Avril Lavigne? 😉
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Características de la moda grunge años 90
La paleta de colores del estilo grunge solía ser en tonos apagados y oscuros, como el verde militar, el marrón y el gris. La estética general era despreocupada y anti-moda, con una apariencia «hecha a mano» que contrastaba con las tendencias más pulidas de la época. Pero, como siempre, estaba bastante cuidada.
El grunge no solo se trataba de la ropa, sino también de una actitud. Encarnaba una resistencia al conformismo, una inclinación hacia lo alternativo y una búsqueda de autenticidad. La moda grunge reflejaba la idea de «hacerlo tú mismo», con prendas desgastadas y accesorios que transmitían una sensación de informalidad y rebeldía. Como decimos en El Attelier, la idea de #HazloTuyo.
Aunque el estilo grunge tuvo su apogeo en los años 90, su influencia ha perdurado a lo largo de los años y sigue siendo una fuente de inspiración para la moda contemporánea. El espíritu relajado y no convencional del grunge continúa resonando en la escena de la moda, recordándonos la poderosa conexión entre la música, la actitud y la expresión personal en la forma en que nos vestimos.
Plataformas, videoconsolas y los mejores dibujos animados. Los 90 nos dejaron iconos del pasado que hoy, más que nunca, se mezclan e imponen compitiendo con las tendencias del presente. Tanto es así que la nostalgia del pasado en sí, se ha hecho tendencia. Y todo lo que en ella reinó un día vuelve para demostrar que el pasado siempre vuelve. Moda, ocio, hobbies, pero, sobre todo, música.
Del escenario a las pasarelas, de las pasarelas a las calles
Los 90 han vuelto trayendo consigo algo más que moda, también música. Pero entre las girlbands y boybands que todas conocimos, se alzaba un tipo de música alternativa que creó todo un estilo en sí: El grunge. Este subgénero del rock alternativo originario de Seattle fue el genero musical imperante durante la década no solo en Estados Unidos, también a nivel mundial. Grupos como Nirvana y Pearl Jam esparcieron la música, cultura y estilo grunge por todo el mundo. Tanto, que los escenarios se convirtieron en una influencia para diseñadores y prescriptores. Hoy, se repite la historia.
La música, como siempre ha hecho, influye de una manera determinante y decisiva en la moda. Lo que comienza en el escenario de un concierto de masas inspira colecciones enteras de diseñadores que, con guiños y homenajes a ciertas subculturas, han logrado imponerlas como tendencia. Siguiendo la estética de los cantantes y sus seguidores, Marc Jacobs sería el primer diseñador que llevó el grunge a la plataforma del lujo.
Artistas y diseñadores que marcaron la moda grunge de los años 90
Después, Yves Saint Laurent y Dries van Noten intentaron traerlo de vuelta. Hoy, jóvenes y adultos de todo el mundo lo han hecho suyo. Incluso celebrities como Cara Delevingne, Rihanna, Sky Ferreira o Alexa Chung han encontrado en el grunge un nicho y, junto con los diseñadores, lo han despojado de los estigmas negativos asociados al mismo.
En un panorama en el que el rock está más aceptado que nunca y experimenta un auge con grupos como Måneskin, las estéticas rock calan más allá de los fans y estilos como el grunge se popularizan e imponen.
Esencia Grunge de pies a cabeza
Este estilo rebelde y desaliñado llegó directo de Seattle para romper las normas, no solo en la música, también en la moda. Influencias icónicas como Eddie Vedder o Kurt Cobain nos dejaron una estética desarreglada y masculina que hoy deja atrás estereotipos y género convirtiéndose en una tendencia casual y polifacética. La ropa desaliñada y andrógina de las tiendas de segunda mano influenció el estilo y la moda grunge, holgada y atemporal, alejada de todo el brillo y color de los 80. En esta estética, los básicos son los protagonistas aunque, sin miedo a la mezcla de texturas y estampados, el estilo grunge se caracteriza principalmente por la superposición de prendas.
Las prendas, tejidos, colores y accesorios se combinan de forma arbitraria en una unión caótica pero sencilla. Camisas de cuadros, cárdigans de punto, denims rotos y desgastados, vestidos lenceros, prendas oversize y colores apagados, básicos a los que materiales como el cuero, el terciopelo, el charol o el tul dan un toque único y melancólico. Gorros, chokers y botas de combate toscas y oscuras adquirieron protagonismo, encarnando en las Dr. Martens toda la esencia del estilismo grunge. Hoy, faldas, medias y bolsos de lujo se unen a esta estética underground para darle un toque lady y reinterpretado de la estética más rebelde.
Por qué tiene sentido
El grunge es mucho más que un estilo o un movimiento estético, es una marcha social subversiva que hoy representa esa rebeldía, desapego e inconformismo que tanto caracterizaron los 90. En 2021, esos valores tienen más coherencia que nunca y entendemos que el regreso del estilo grunge a las pasarelas no es un capricho vacío. Sea por inconformismo o por pura nostalgia, por valores o simplemente por moda, el estilo grunge y los 90 están más presentes que nunca.
Incluso las tendencias de maquillaje se están inclinando hacia ese aspecto desaliñado, el Clean Look ha quedado atrás para dejar paso a maquillajes sin mucho esfuerzo, peinados con volumen con efecto despeinado… ¿Ahora, sí?
La moda es cíclica y todas las estéticas vienen y van con el paso del tiempo. Con más razón la década de los 90s que será siempre por excelencia la época predilecta para los diseñadores, y nosotras ENCANTADAS.
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